Investigación del doctor Remigio López Solís, de la Universidad de Chile
Arena en los ojos
Las lágrimas, explica el doctor López, están constituidas por una mezcla de agua y diversos lípidos, proteínas y mucinas, todos ellos generados por una serie de distintas glándulas lagrimales. Al interactuar estos componentes entre sí y con la superficie ocular, organizan tras cada nuevo pestañeo una película de recubrimiento que, a manera de un lente adicional estable y permanentemente renovable, permite el paso de la luz hacia la retina y mantiene húmeda la superficie ocular. “Nuestra hipótesis es que alteraciones cualitativas o cuantitativas en el contenido de algunos componentes lagrimales se asocian a la condición de Ojo Seco”.
Pacientes de LASIK
Para la identificación de alteraciones moleculares asociables a esta enfermedad, los investigadores diseñaron un “modelo de estudio consistente en el seguimiento continuo de la aparición de los síntomas de ojo seco y su posterior extinción en cada paciente sometido a una cirugía refractiva LASIK”, informa el doctor López.